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XXV Aniversario
mientos de la persona, me refiero a palabras Así lo hicieron nuestros padres
escritas con mayúscula,…compañerismo, fa- en el ya lejano septiembre
milia y respeto se grababan a fuego para el de 1979, que se dice pronto.
resto de nuestra vida. Si acaso alguien lo olvi- Depositaron sus joyas y
daba ahí estaban Don Gaspar, Don José y el “objetos” más valiosos a buen
Sr Cerdán para apuntalar la enseñanza recaudo, en lugar seguro,
el Colegio Inmaculada.
Establecimos en aquel tiempo nuestro parti-
cular código de Hammurabi. Primeras normas
de conducta para las horas de patio. Prohibi-
do “mamar” en las fuentes, a los mayores no
se les discute, penalti contra gol-gol,…. Eran
los años de pantalón corto, polvo en los zapa-
tos y fútbol, ¡ay el fútbol!, palabras mayores…
Don Matías, Don José, Don Isidro, Don Pedro de capilla, piscina y montaña… Minucias al
Gálvez, Don Vicente y Sr Albarracín reforza- fin y al cabo porque no era esa la esencia sino
ban las lecciones y, quizá sin darnos cuenta, el haber compartido el tiempo con vosotros y
las más profundas zse insertaban en nosotros el haber cultivado juntos un sentimiento co-
para siempre. lectivo.
Sin embargo el colegio no eran sólo lecciones La puerta de la Enseñanza Primaría se estaba
y tiempo de patio. Había mucho más, el Día cerrando para siempre, nuevos desafíos es-
de nuestra Comunión, el Día de la Familia o el peraban al grupo. Los primeros golpes de la
de la Inmaculada nos hacían caer en la cuenta vida se dejaban sentir en algunos, pero tran-
de en qué Colegio estábamos. Disfrutábamos
Revista de la Asociación de Antiguos Alumnos Jesuitas Alicante Periscopio 2016 7
